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El Coliseo, una de las Siete Nuevas maravillas del mundo

colos.jpgY fue así como el siete de julio de 2007 llegó a Lisboa para elegir las 7 NEW WONDERS hechas por el hombre….
La grande Muralla China (es la única construcción que ha hecho el ser humano que se puede ver desde el espacio), Petra en Jordania (inmortalada gracias a Indiana Jones), Machu Picchu en Perú (ciudad símbolo del Imperio Inca), Taj Mahal en India (mausoleo deseado por el emperador Shah Jahan para honrrar a su última y amada esposa), Chichen Itzá (conjunto arquitectónico símbolo del Imperio Maya), El Cristo Redentor de Corcovado en Brasil y El Coliseo en Italia.
Y como la Accademia del Giglio se encuentra en Italia pues hablemos de esa nueva maravilla del mundo llamada Coliseo, se trata de un antiguo anfiteatro romano denominado Flavio que adquirió su nombre actual durante la Edad Media gracias a la colosal estatua de Neron construida junto al mismo. Esta obra arquitectónica fue realizada por los emperadores “Flavi” y podía contener hasta 50,000 espectadores durante los espectaculos. En la actualidad se pueden observar las tres ordenes arquitectónicas del Imperio Romano (Dórico, Jónico y Corintio) en los arcos externos de traverino que se encuentran en los tres pisos que componen el coloso romano.
Pero, sabemos en realidad ¿cómo funcionaba el Coliseo durante el Imperio Romano?
En el Anfiteatro se realizaban una gran variedad de espectáculos: en la mañana las “Venationes” (lucha entre animales exóticos o bien entre bestias y hombres mismos que en ocasiones salían al escenario privos de alguna defensa). Las “Silvae”, era un tipo de representación con una escenografía salvaje que intentaba asemejar a una selva llena de animales que durante el espectáculo venían masacrados. Pero no sólo se realizaban espectáculos crueles, existían también los momentos chuscos que exhibían elefantes escribiendo algunas palabras en la arena con la trompa. Pero sin lugar a dudas el espectáculo que más llamaba la atención del público era el de los “Gladiadores” hombres valientes dispuestos a arriesgar la vida y que en aquel tiempo eran admirados y aclamados como hoy lo hacemos con las estrellas del deporte.
Es así como transcurrían los días en el Coliseo y como podrán notar no se realizaban masacres de cristianos, no en el Coliseo y no durante el Imperio Romano.
Así es que si se encuentran por Roma no dejen de visitar esta Nueva Maravilla del Mundo.

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